María Dolores Pradera (Madrid, 1926) ya está ‘mejorcita’ de la neumonía que la obligó a cancelar todos sus compromisos, todos menos uno, ‘Gracias a vosotros’, un disco hecho del amor que le tributan 14 de los mejores artistas del país y que se ha convertido, dice, en el mejor premio de su vida.
Miguel Poveda, Pablo Alborán, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Luis Eduardo Aute, Raphael, Sergio Dalma, Diego el Cigala, Diana Navarro, Víctor Manuel, Ana Belén, Manolo García, Miguel Bosé y Pasión Vega son los escuderos que rinden homenaje a esta mujer que nunca se ha despeinado, aunque se ha desmelenado muchas veces por dentro.
‘El disco me ha llenado mucho y he sido muy feliz. Son compañeros maravillosos y hemos estado muy unidos. Trabajar con ellos me ha ayudado a curarme, aunque he llorado mucho escuchándolo’, aseguraba la artista esta tarde en un encuentro con periodistas.
El 11 de febrero -nunca se le olvidará la fecha, porque fue ‘el día que hizo más frío en Europa’-, salió de su casa para ir a la televisión y notó síntomas de que algo no iba bien.
Se le declaró una neumonía y, cuando ya se estaba recuperando, allá por mayo, ‘alguna medicación’ le provocó un choque metabólico del que continúa convaleciente y que le hizo perder diez kilos en una semana.
Hoy, vestida ‘llena de capas’ para parecer ‘más’, y ya con dos kilos recuperados, ha hecho gala de su prodigiosa memoria, ha tenido palabras de alabanza para todos y cada uno de sus compañeros en el disco, ha bromeado, ha contado anécdotas y ha acabado cantando las ‘Mañanitas’, demostrando que en el disco hay ‘mucho amor y agradecimiento’, pero nada de ‘photoshop’ para su voz.
La idea del homenaje, una recopilación con 14 de algunas de sus mejores canciones, aunque ha grabado más de mil, fue de ‘la casa de discos’ -Sony-, que fue también quien propuso a los artistas porque ella, ha desvelado, ‘nunca se hubiera atrevido’ a hacerlo.
‘Al principio me asusté porque no me sentía bien, pero todos tenían algo por lo que se sentían unidos a mí y eso me ha compensado de mis dolorcitos. Son gente que trabaja y destaca y no sabían que me adoraban tanto, la verdad’, ha dicho.
Empezó a grabarlo el 9 de julio en estudio con Diego el Cigala, en agosto descansó y lo retomó en septiembre. El único con el que no ha podido estar es Serrat, que registró ‘Tu nombre me sabe a hierba’ en México.
A cada uno le sugirieron tres temas y, en general, todos han elegido una canción ‘inesperada’ en su estilo; por eso, ni Ana Belén canta ‘Lía’, sino ‘La media vuelta’, ni Víctor Manuel ‘No se por qué te quiero’, sino ‘Amarraditos’.
El que la ha hecho llorar ‘mucho’ ha sido Alborán, nieto de una amiga suya de cuando vivía en Málaga ‘de jovencita’ con los hijos -Elena y Fernando- que tuvo con el actor Fernando Fernán Gómez (1921-2007), del que se separó en 1957.
‘Cuando le escuché conmigo en ‘No se por qué te quiero’, me caían las lágrimas porque las voces se funden. Es que yo tengo un poco voz de hombre’, ha argumentado.
Cigala, con el que canta ‘Lágrimas negras’, se ha revelado como un gran admirador de ella y ‘del padre de sus hijos’, del que quería que le contara anécdotas. ‘Pero claro, hace tanto que no le veo…’, ha ironizado.
Diana Navarro canta un ‘Lía’ ‘muy especial’; Manolo García ‘parece mexicano’ en ‘No volveré’; Poveda le ha impresionado muchísimo en ‘Fina estampa’; lloró con Bosé en ‘El rosario de mi madre’ y con Dalma en ‘Procuro olvidarte’; y ‘Caminemos’, la primera que ella cantó en público, en 1952, la interpreta con el ‘elegante’ Aute, que le hizo ‘una declaración de amor tremenda’.
Le ha encantado la ‘guapísima’ Pasión Vega en ‘Habaneras de Cádiz’, y está feliz con el ‘Gracias a la vida’ que hace con Raphael.
Confiesa que le ‘aturde’ la situación política y le ‘preocupa mucho’ la económica: ‘Viví la Guerra Civil y la posguerra, y esto es más tremendo porque somos muchos más’.
Lo ha pasado ‘mejor’ que ‘peor’ en su vida, ha conocido gente ‘extraordinaria’ como Atahualpa Yupanqui, José Alfredo Jiménez, Lola Beltrán y Lola Flores, y ha tenido y tiene muchos amigos que la adoran, entre ellos Sabina, con el que hace ‘La flor de la canela’.
‘Es muy divertido y me pasan muchas cosas con él, como cuando me llevó a casa una madrugada y yo me lamenté de que no hubiera ‘paparazzi’ en la puerta o como cuando le pregunté que cómo nota él que está afónico’, relata.
Si se pone ‘bien del todo’, se dará una vuelta por América. ‘A lo mejor’ hace una segunda parte de este disco y emprende un proyecto al que le tiene mucho cariño: un disco de copla.
‘Mi ídolo de pequeña era la Piquer. Me salía con naturalidad cantar copla; por eso quería ser gitana, para ser morena y con ojeras’, se ríe.
Fuente: La Región – ENLACE