Manolo García García-Pérez (Barcelona, 1955) nos atiende recién salido del médico. «Es una lumbalgia. Los conciertos de Salamanca y Huesca los he hecho con la espalda jodida y un dolor del copón. El médico al volver del concierto de Huesca me dijo: ‘Mira, debes hacer un par de semanas de reposo absoluto porque tienes la espalda hecha una mierda’. Claro, he estado doblado, como una bisagra oxidada. Me ha jodido mucho, porque tengo una hoja de servicios impecable y en 30 años que llevo haciendo conciertos nunca fallo, no suspendo nunca. A veces con unas situaciones climatológicas durísimas, de tormenta, de lluvia, pero al final he acabado tocando. Habré suspendido dos o tres veces, no más, pero en 30 años, que no está mal. Y ahora este año llevo dos paraditas y me digo, mecagüen…». http://www.manologarciaycia.com

Ya aplazó en junio conciertos vascos. «Eso fue por una apendicitis flagrante. Este año estoy peor que El Pupas. Tenía programados seis conciertos en Barcelona y después del segundo, hostia, me encuentro fatal, rarísimo, realmente mal. Y voy al hospital y me miran y me dicen: ‘Tío es que tienes una apendicitis y hay que operarte ya’. Y me operaron, je, je… Estuve también un mes de baja». http://www.manologarciaycia.com

Y ahora viene con ganas. «Somos ocho músicos. Hacemos un formato a ratos semiacústico y a ratos cañero. O sea, aunque la gira es de teatros la cabra tira al monte y hay momentos más eléctricos, más guitarreros y roqueros. Digamos que es un refrito, un concierto mitad y mitad». Lleva una cuarentena de bolos por teatros de 1800-2500 personas. «Me da mucha proximidad y calidez. Tocamos más relajados». http://www.manologarciaycia.com

Esta noticia la ha adquirido Petaos.net para publicarla en http://www.manologarciaycia.com. Fuente: El Correo – Óscar Cubillo