Monthly Archives: mayo 2006

MG: Manolo García, pintar la música (Woman, mayo 2006)

manolo_woman_mayo_1y2_pSigue siendo un chico de barrio. Nació y vive en Poblenou, escenario de la Barcelona multicultural que vendió el Fórum. «Se han cargado toda la arquitectura industrial de principios de siglo, no han respetado nada», denuncia García. En su discurso siempre aflora un punto de cabreo que él se toma como una obligación: «Soy un escéptico participativo. No me creo nada de lo que me cuentan, por eso intento protestar.»

Su mirada está más cansada, pero mantiene la chispa de hace veinte años, cuando formaba parte de El Últi mo de la Fila. Luego llegó su etapa en solitario, a la vez que su energía fluía hacia el arte a través de los pinceles.

¿Qué fue antes, cantar o pintar?
Dibujar. En el colegio, en vez de jugar al fútbol en el patio, me quedaba haciendo dibujitos. Para mí era instintivo, una necesidad. Convencí a mi madre para que me comprara un curso por correspondencia; ella y un profesor me animaron a seguir. Paralelamente, participaba en un coro, y a los trece años me di cuenta de que la música me gustaba de verdad.

¿Vendes tus cuadros?
Nunca, no tengo ningún interés profesional, soy completamente amateur. Hace unos años vendí algunos, pero no lo he vuelto a hacer. Prefiero regalarlos, a una ONG, a un amigo como muestra de afecto… Pero yo no puedo decir que sea un pintor, soy un aprendiz, una persona que pasa horas delante de una tela para abstraerse del mundo que le rodea.

manolo_woman_mayo_3

Fabricar una realidad

«Quién canta su mal espanta», decías. ¿Para qué pintas?
Es una forma de plasmar sueños, de alejar fantasmas, de fabricar mundos propios. En este caso, de colores, formas, vólumenes; en el de la música, de sonidos. No se trata de huir de la realidad, sino de fabricarte la tuya.

Eres muy crítico y comprometido, ¿es también una forma de lucha?
Sí, seguro. Asistimos a una vorágine que hace que nuestros días, a veces, sean grises, tediosos. Intento rebelarme contra esa forma de alienación, esclavitud, crispación y consumismo que intentan imponernos, y que crea mucha insatisfacción. Por eso pinto, para defenderme de ese bombardeo.

¿Qué podemos hacer los demás?
Cuidar las relaciones sociales, porque cada vez estamos más lejos del ser humano; y protestar, alzar la voz. Y buscar el silencio, que ayuda a ser individuo. A mí me gusta estar solo conmigo mismo, pensar, leer… Lo único que te puede dar cierta paz es el espíritu. Mi consejo es que busques una parcela de creatividad para luchar contra todo eso. Hay que huir del fragor de la ciudad; en realidad, lo único que necesitamos todos es un poquito de sol.

 

 

¿Te asusta enfrentarte a un papel o a un lienzo en blanco?

Me divierte tanto que me tiro de cabeza, no me angustia nada. No quiero sonar pretencioso, pero lo que yo quería, tirar adelante una historia musical, ya lo he obtenido con creces. Es un oficio en el que sigo sintiendo curiosidad, pero no tengo una ambición desmesurada, sólo quiero vivir, comer, ser feliz… Eso te tranquiliza mucho. Quien menos quiere, menos sufre.

¿Cumplir todos los sueños deja una sensación de vacío?
No, al revés, yo siempre tengo nuevos. Aún me queda mucho por aprender en la pintura, en la música, en la vida… Se trata de ir dosificando las cosas.

¿Qué nos revela más cosas secretas de ti, una canción o un cuadro?
Hay más pistas en una canción, aun- que no cuento cosas mías, tengo mucho pudor. Callejear y observar a las personas es mi fuente de inspiración.

Tus discos en solitario son más meláncolicos, mientras que tu obra pictórica es vital y colorista… ¿Es una contradicción lógica?
Es una ambivalencia. Todos tenemos muchas caras, muchos rincones ocultos que sacamos como y cuando podemos. Intentas comportarte de una manera u otra según a quien tienes delante, mostrar tu lado más amable y accesible para facilitar el acercamiento, para abrirte un poco.

manolo_woman_mayo_4

En “Lápiz y tinta” (“Astronomía razonable”, 1993) anunciabas que «los días se van; ahora quiero pintar». ¿Era nostalgia por un tiempo que aún no había llegado o un anuncio de lo que vendría?
Después de años de carrera musical y giras, sentía la necesidad de una etapa más tranquila. Aunque me interesa más la vida nómada que la sedentaria. Tengo ganas de estar vivo, de sentirme parte de toda esta gran noria.

Fuente: Woman – Myriam Serrano